Cuando se debe automatizar un portón corredero instalado en pendiente, es fundamental tener en cuenta las fuerzas que intervienen y que pueden afectar al correcto funcionamiento del sistema. En estas situaciones, el movimiento de la hoja nunca es neutro: la gravedad tiende a empujar el portón hacia abajo, generando ruido, desgaste y, en algunos casos, movimientos incontrolados. Para resolver estas problemáticas, ofrecemos una gama de frenos radiales diseñados para garantizar seguridad, silencio y regularidad en el movimiento.
El principio de funcionamiento es sencillo pero eficaz: el freno actúa ofreciendo resistencia en un solo sentido de rotación, de manera que limita y controla la velocidad del portón en bajada, manteniéndola constante tanto con la automatización en marcha como en caso de desbloqueo del motor. Nuestra oferta está compuesta por diferentes soluciones, capaces de adaptarse a varios tipos de instalación:
- Versión estándar (7 Nm): la solución compacta que reduce al mínimo los deslizamientos y asegura un movimiento fluido. Disponible con piñón M4 (199.1) o M6 (199.3).
- Versión intermedia (14 Nm): obtenida instalando dos frenos en paralelo mediante un soporte dedicado (199.11). Esta configuración representa un compromiso ideal para portones que requieren mayor resistencia sin llegar a valores excesivos.
- Versión reforzada (30 Nm): pensada para portones más pesados o con pendientes pronunciadas, garantiza un control óptimo de la velocidad. También disponible con piñón M4 (199.2) o M6 (199.4).
Todos los modelos están diseñados para uso en exteriores, fabricados con materiales resistentes a la corrosión y pensados para garantizar la máxima durabilidad en el tiempo. Gracias a esta gama, es posible elegir la resistencia más adecuada a las características del portón y al grado de pendiente, obteniendo siempre un movimiento seguro, silencioso y controlado.

